En los cuatro ensayos que integran este libro, William Ospina interpreta los males, carencias y debilidades que agobian a Colombia. Encuentra en la simulación la actitud más corrosiva de la identidad del colombiano y en la inequitativa distribución de la riqueza los orígenes de la violencia y la perversidad de un Estado que sirve más a intereses particulares que a los de la comunidad y a la búsqueda de la prosperidad para todos. La falta de legitimidad de los gobiernos y la poderosa influencia de fuerzas al margen de la ley provocan el lúcido cuestionamiento que Ospina hace de la democracia en Colombia.