La idea central de este libro no es menos contundente que polémica: la crónica es lo mejor de la literatura mexicana.
Sara Sefchovich encuentra en la crónica la clave para entender nuestra visión del país y de nosotros mismos y su expresión cultural. De acuerdo con la autora, «la narrativa, la poesía y el ensayo funcionaron como crónicas a lo largo de la historia de México», y ni el cine, ni la música ni la fotografía o la pintura misma se alejan de esta vocación por la inmediatez, por el relato a la vez fiel e inventado de la realidad, por la problemática reflexión sobre el yo de quien cronica, por la creación de obras que sean a la vez retratos, espejos y cajas de resonancia.
Al recorrido histórico por el género, desde el Popol Vuh y Hernán Cortés hasta los autores de hoy, se agrega la lectura crítica, a veces cómplice, a veces mordaz, pero siempre profunda e informada de Sefchovich. La invitación es clara: reestructurar nuestra idea de la literatura mexicana con la lectura de sus cronistas más notables.