Don Alonso, El caballero de Olmedo, se enamora de doña Inés en Medina, a cuya famosa feria ha asistido. Fabia, una celestina conocida de su criado Tello, le ayuda a hacer saber de su amor a la dama, quien a su vez siente amor por él. Pero, don Rodrigo también la pretende y se siente furiosamente celoso de su rival, que, además, ha logrado fama y éxito en la feria por su valor y su arte en el toreo. Al terminar las fiestas, el caballero se dirige a Olmedo y, por el camino, le advierten de que planean atentar contra su vida, aunque él no hace caso. En efecto, su enemigo lo ataca y le da muerte. Tello comunica la noticia en la casa de la amada, cuyo padre ya había accedido a la boda de Inés y Alonso. Finalmente, el rey Juan II, presente en la feria, ordena el ajusticiamiento del culpable y Lope de Vega hace justicia con su argumento.