Exacto.
Los ojos grises de Annabeth empezaron a chispear. Dedicó a Nico una sonrisa de soslayo.
—Un momento —dijo Percy—. Entonces ¿quieres decir…?
—Exacto —repitió Nico—. Pero está bien, no pasa nada. Es decir, ahora veo… que eres mono, pero no eres mi tipo.
—Que no soy tu tipo… Un momento. Entonces…
—Nos vemos, Percy —dijo Nico—. Annabeth.
Ella levantó la mano para chocarle los cinco.
Nico le dio una palmada. A continuación cruzó otra vez el césped, hacia donde le esperaba Will Solace