Este no es un recetario al uso, sino una forma de hacer humor usando el estilo de los múltiples libros de cocina que vieron la imprenta en el siglo XIX. Hay recetas de todo tipo y también poemas con que podemos adornar una buena comida.
Dicen, al verme tan loco, y al verte, niña, tan fresca, que yo parezco demente y tú pareces de menta
Luis Aguilar Sandovalhas quoted7 years ago
Se adquiere un lenguado que tenga espinas, pellejo y cabeza; porque si no sería imposible cumplir la primera prescripción de la receta, que consiste en despellejar al lenguado, decapitarlo y quitarle las espinas.
HAZEL ELIHU CHAVEZ ARMENTAhas quoted5 hours ago
Nunca pongas los codos sobre el mantel y mucho menos el mantel sobre los codos. Especialmente esto último es de mal efecto.
No cojas las aceitunas con el tenedor, sino con los dedos, prefiriendo los de la mano; pero no con todos, sino con dos, y aun si te es posible con uno solo. Esto es lo más elegante.