Además de escribir un libro sobre los graves problemas ambientales que afectan al planeta a principios del siglo XXI, las autoras quisieron que este tema fuera accesible a todos los lectores, dándole forma de una novela -de ahí su nombre— en la que los personajes intercambian, aparte de sus sentimientos, reflexiones y problemas existenciales, los datos más actuales con respecto a la contaminación en sus múltiples aspectos: del aire, del agua, de la vida vegetal y animal, del ruido; en fin, de todas las formas que asume, sin olvidar el agujero de ozono.