Maravillosa novela sobre la amistad, el amor, los celos y la irreversibilidad de las decisiones. Sobre las cicatrices que dejan el paso del tiempo, la muerte y el luto. Fácil de leer, es un libro emocionante, en ocasiones muy divertido y lleno de referencias cinematográficas, musicales y ciclistas, algunas de las pasiones de adolescencia de sus protagonistas. Nacido como guión para una película, se trata de una novela que ha vendido más de 150.000 ejemplares en Holanda, disponible en muchas otras lenguas y que llega ahora traducida por primera vez al castellano.
Bart Hoffman, periodista a punto de cumplir los 50 años, empieza a contactar con sus viejos amigos del instituto. Tras varias décadas sin apenas contacto entre ellos, planean volver juntos al Mont Ventoux. Un camping a los pies del gigante de Provenza fue el lugar donde fueron felices a las puertas de la mayoría de la edad, en unas vacaciones que marcaron su paso a la edad adulta y la difuminación de su amistad. Bart, André, Joost, David, Peter y Laura formaban entonces un inseparable grupo de amigos, pero se fueron alejando unos de otros. André había sido traficante de drogas, Joost era un reconocido científico y David, el único con quien Bart todavía mantenía contacto, era el dueño de una agencia de viajes. Laura, la única chica del grupo, a la que habían perdido completamente el rastro tras esas vacaciones, vivía en Italia trabajando como directora de escena. Treinta años después regresan juntos al Mont Ventoux, lugar donde se dejó la vida Peter, el prometedor poeta que era el último integrante de su pandilla.