«La tumba», escrita por José Agustín en 1964, abre en México un nuevo estilo narrativo, con una sensibilidad diferente y una escritura original. El escenario urbano, principalmente el Distrito Federal, es descrito de manera novedosa, y sus personajes, jóvenes que representan las inquietudes y nuevas maneras de expresarse, se convierten en símbolos de la época. En esta obra el autor narra la vida de un muchacho, Gabriel Guía, de clase media-alta, y su manera de vivir, similar a la de muchos jóvenes contemporáneos, que se preguntan el sentido de su existencia. «“La tumba” es una de las obras que liquidarán el pasado. Una novela extraordinaria». Juan Rulfo. «Un testimonio sincero, espontáneo, que ayuda a comprender el fenómeno de una adolescencia en búsqueda. Un libro que abre signos de admiración para un nuevo novelista». Vicente Leñero. «Un escupitajo a las buenas conciencias, que inventaron rebeldes sin causa… el libro lúcido y emocionante de una generación». Gustavo Sainz.