Los personajes no son simpáticos de entrada: debemos leer varios capítulos para ir identificando el encanto de cada uno: los "emperadores" que a veces parecen estar en competencia unos con otros; la amiga que tiene más secretos de los que nos imaginamos; el sacerdote, quien da más sorpresas que todos los anteriores.
Una historia de suspenso, con la resolución de un crimen como pretexto pero que trata más de la amistad a través de los años y de lo que estamos dispuestos a hacer por los amigos, incluso si no es legal.