Todo comenzó con esa maldita nota: «Tú quieres lo que yo necesito»
Madison no puede imaginar cómo va a cambiar su suerte cuando se topa con Brayden Blair, cuyo nombre es sinónimo de dinero, poder e influencias, uno de los solteros más codiciados del país y protagonista de sus fantasías mas íntimas. En ese encuentro y bajo un contrato de confidencialidad, Brayden le hace una sorprendente propuesta que ella en un principio rechaza. Sin embargo, es incapaz de negarse por mucho tiempo; el poder de seducción de ese hombre la cautiva por completo.
El deseo irresistible que sienten el uno hacia el otro se convertirá en algo más profundo, pero una terrible amenaza lo puede trastocar todo.