Hace una década, después de volverse vegana, Clare Mann comenzó a defender los derechos de los animales en conferencias, festivales y en línea. Los veganos vinieron a verla directamente o le dijeron a sus médicos que sólo querían ver a practicantes veganos, ya que sus dolores aumentaron cuando les dijeron que tenían depresión o que no juzgaran al mundo con tanta dureza. Clare cree que no eran necesariamente enfermos mentales, pero que demostraron las reacciones normales de sentirse humanos después de descubrir el encubrimiento del abuso animal industrializado.
Clare es un testigo contundente de la angustia de conocer el abuso sistematizado de los animales en la sociedad. Necesitaba un nombre para lo que ella cree que es una desesperación existencial, y encontrar soluciones para los veganos evitando la medicalización de la enfermedad.
Vistopía es el nombre que Clare creó para explicar la experiencia del vegano, y este libro le ofrece a los veganos una forma de navegar por su dolor y convertirse en los campeones necesarios para crear un mundo más compasivo.