En las conversaciones cotidianas se alude con frecuencia al fin de esta vida, a petatearse, a emprender el viaje, a entregar el equipo, a dar el changazo, a quedarse tieso, a ir con Dios, a ser comido por los gusanos, a llegar con San Pedro a rendir cuentas, a comparecer ante la Justicia Divina, a entregar los huaraches, a levantar los tenis y a tomar el camino del camposanto.