C. S. Lewis ofrece en este ensayo una lúcida reflexión sobre el amor.
Parte de lo más bajo a lo más alto, del gusto y del placer de los sentidos, y de la necesidad de amor que todo ser humano experimenta, para recorrer a continuación cada uno de los cuatro amores: el afecto, la amistad, el amor erótico y la caridad. Cada uno de ellos merecerá un capítulo sereno, pues «lo más alto no puede sostenerse sin lo más bajo, una planta tiene que tener raíces abajo y luz del sol arriba, y las raíces no pueden dejar de estar sucias…».