Ortega y Gasset pidió al filósofo la cortesía de la claridad. Las circunstancias del momento presente, en continua transformación, añaden al requerimiento orteguiano otro segundo no menos acuciante: la brevedad. Quien auténticamente sabe algo, acierta a decirlo de forma luminosa y en breve espacio, por ejemplo mil palabras. Y este es el espíritu que anima a Javier Gomá en esta colección de ensayos, o microensayos, que se resume así en su título: Todo a mil.
El objetivo es, en un millar de palabras, introducir al lector en la almendra de la reflexión filosófica. Así, por ejemplo, alguno de estos microensayos se arriesgan a definir con precisión cuestiones normalmente difusas como la sabiduría frente a la inteligencia o la dignidad humana; hay unos que abogan por actitudes contracorriente, como los beneficios de estar sentado, el desdén hacia las novedades, las ventajas del chisme o la afirmación gozosa de nuestro tiempo; otros critican ideas recibidas tan asentadas como el prestigio de la transgresión, la noción tradicional de “vida privada”, o la molesta tendencia a la sinceridad excesiva; otros más toman posición respecto a la responsabilidad de la crisis o el significado profundo de la paz social conquistada por el Estado de derecho; mientras otros, en fin, expresan la voz más personal del autor.
Con este libro, Javier Gomá da un paso más en su decidida voluntad de hacer una filosofía mundana, abierta a todos, y ofrece así la mejor introducción posible, en mil palabras, a los más serios y perennes problemas filosóficos.