La etnia musulmana de los rohinyá protagoniza una de las crisis migratorias más graves de las últimas décadas. Expulsado de Myanmar (antigua Birmania), sin estado y sin apoyos, este pueblo lleva varias décadas sufriendo oleadas de violencia y ya no es bien recibido en ningún país. En la actualidad, en la vecina Bangladés, unos 700.000 rohinyás, la mayoría niños, sobreviven en Kutapalong, el campo de refugiados más grande del planeta, una megalópolis que ha triplicado su población en menos de un año. No pueden volver a Birmania ni labrarse un futuro en su país de acogida. Malviven en tierra de nadie, entre hambre y enfermedades, y dependen para todo de la ayuda internacional. Muchos querrían volver, pero la violencia contra ellos no ha cesado todavía.
Este libro aborda las causas de este éxodo, los orígenes de este odio atroz, de esta persecución sistemática. ¿Por qué los rohinyá se han convertido en la minoría étnica y religiosa más perseguida del planeta? Veremos que el drama se gestó durante los años de poder militar pero que, paradójicamente, se ha desarrollado bajo el mandato de la premio nobel de la paz, Aung San Suu Kyi.