No es común que una revista de filosofía, humanidades y ciencias sociales llegue a veinte años como llega Xipe Totek. Más aún, quizás algunos pensaron que no llegaría ni a cinco. Desde el principio se planteó el objetivo de la revista en compartir una reflexión viva y liberadora de cuanto oprime al hombre y a la sociedad, y así lo sigue siendo. Quisimos pensar seriamente asuntos que nos incumben, nos afectan y nos retan a encontrar caminos de liberación integral. Importante y muy enriquecedor es el aborde multidisciplinar para cada tema, con especialistas de diversas comprensiones: filosofía, sociología, psicología, ética, educación, teología, literatura, artes, cine, etc. Creo que pocas revistas logran tejer esta presentación tan rica, creativa e integral de varias ópticas en torno a un tema vital, y hacer del pensar filosófico una práctica cotidiana, existencial, intercultural, sin disminuir su hondura y rigor científico. En los tiempos actuales que vivimos (y padecemos) de insensatez, irracionalidades, violencia, falta de ética, atropellos múltiples a la dignidad humana, el aporte de Xipe Totek se vuelve más necesario y relevante.