Varios estudios revelan que ya educas a tu bebé cuando está en tu vientre. Ya estás ejerciendo como madre, cuando lo acaricias con la mano en tu barriga, comes y bebes de forma sana, llevas una rutina de vida saludable, haces deporte, vives el día a día feliz con tu pareja, familia y amigos... Todo lo notará tu bebé. Se sentirá amado y deseado por tus caricias, tu tono de voz y tus monólogos hacia él, el latido de tu corazón... Habrá alimentos que le des, que posteriormente serán los que más le gusten. Se calmará fácilmente cuando le abraces porque recordará esa calidez. El ambiente idóneo en el útero le formará para la vida en el exterior.