En las salvajes tierras de Alaska, vive una familia que creció aislada de la civilización.
Billy Lowell, su mujer Ely y sus cinco hijos, cuatro chicos y una chica, han pasado los últimos años sin ningún tipo de contacto con el mundo exterior, a excepción de unas cuantas ocasiones en las que se han tenido que trasladar a los pueblos cercanos para obtener herramientas o enseres que el bosque no les proporciona.
Los Lowell se verán alterados con la llegada a sus vidas de una chica que precisa de su ayuda, Amanda. Ella aparecerá de la nada trastornando su rutina y exponiendo su secreto.
Ante esta circunstancia, el segundo de los Lowell, James, no comprende el sentimiento que ha despertado en su interior esa muchacha ni los instintos primitivos que han emergido a la superficie por su culpa.
La cuenta atrás ha dado comienzo y James conocerá a la mujer que lo cambiará todo; esa persona por la que vale la pena parar, respirar y valorar lo que realmente importa: el amor.
Pero, ¿y si eso no es suficiente para alcanzar la paz y felicidad que tanto ansían? La guerra está a punto de dar comienzo, y puede que lo que sienten el uno por el otro no sea suficiente para ganarla.
La manada siempre es lo primero.