Cuarto de desechos

los marranos aquí, habrían de protestar y hacer huelga. Siempre escuché hablar de la favela, pero no pensaba que fuera un lugar tan asqueroso. Sólo Dios para apiadarse de nosotros

Lo que me indigna es la codicia de los hombres que se exprimen unos a otros como se exprime una naranja.

–Sí. Pero haga de cuenta que no lo estoy, porque tengo mucho asco de aquí. Esto sí que es lugar para marranos. Pero si pusieran a

El mareo del hambre es peor que el del alcohol. El mareo del alcohol nos impulsa a cantar. Pero el del hambre nos hace temblar. Me di cuenta de que es horrible tener sólo aire dentro del estómago

Es igual a nosotros que no nos gusta la favela, pero estamos obligados a residir en la favela

De cuatro en cuatro años se cambia a los políticos y no se soluciona el hambre, que tiene su matriz en las favelas y las sucursales en las casas de los obreros

Los géneros alimenticios deben estar al alcance de todos.
Cómo es de horrible ver a un hijo comer y preguntar: “¿hay más?” Esas palabras, hay más, quedan oscilando dentro del cerebro de una madre que mira las ollas y no hay más

Debo incluirme, porque yo también soy favelada. Soy el sobrante. Estoy en el cuarto de desechos, y lo que está en el cuarto de desechos o se quema o se va al basurero

Y así es como el día 13 de mayo de 1958 yo luchaba contra la esclavitud actual: ¡el hambre

Laboratorio de Traducción de Unila, un proyecto de extensión de la Universidad Federal de Integración Latinoamericana, ubicada en la ciudad de Foz do Iguaçu (Brasil). El proyecto, que inició en el 2016, se sustenta en una perspectiva sociocontructivista