Narración de la increíble trayectoria histórica de la comunidad celta que habitó por siglos en el impresionante archipiélago de San Kildán o Santa Kilda, al norte de las Islas Hébridas. Hasta que la decisión de instalar en él una base militar llevó al Gobierno de Londres a la evacuación de la totalidad de sus habitantes, destruyendo sin consideración sus vidas y acabando impunemente con uno de los espacios socioculturales, comunitarios y antropológicos más interesantes de Europa.