Un estudio de la Universidad de Bordeaux concluyó que el azúcar es tan adictivo para nuestro cerebro como la cocaína. Y no se trata solo de los azúcares evidentes como el brownie de la merienda, sino de aquellos que no somos conscientes de estar consumiendo y que igualmente alteran nuestro umbral del dulzor y nuestra salud. El autor nos guía en un viaje por todo lo que rodea el azúcar, las consecuencias de su consumo en niños y adultos, las artimañas de la industria alimenticia para ocultarla y los beneficios de dejarla. Nos propone también diversos planes y alternativas para iniciar el recorrido más dulce y saludable: vivir sin azúcar. Este libro busca poner fin, de una vez por todas, a la presencia descontrolada del azúcar en nuestras vidas. Cuando devores la última página de La vida es más dulce sin azúcar, te lo pensarás dos veces antes de consumir azúcar de manera habitual, perjudicando tu cerebro, tu metabolismo y tu calidad de vida.