Ya se trate de pintura, escultura, grabado o litografía, todas las formas de arte han estado al servicio del erotismo desde un comienzo. La fotografía no es una excepción a esta regla. Los primeros procesos fotográficos, los daguerrotipos, se enriquecieron desde su nacimiento por los desnudos, ofreciendo una imaginería que evocaba la pintura de la época, aunque de manera más realista, pero al mismo tiempo más cruda.
Nota