¿Y podemos alimentar una boca más? —sin volver la cabeza, preguntó— ¿Podemos, Madre?
Madre se aclaró la voz.
—No se trata de si podemos, sino de si estamos dispuestos —contestó con firmeza—. Lo que es «poder», no podemos hacer nada, ni ir a California ni ninguna otra cosa; pero lo que queramos hacer… vamos, que haremos lo que nos propongamos.