Demasiado tarde, desde luego que sí. En enero, tras la victoria de Falkirk, esa muestra del respaldo de Francia podría haber sido decisiva. Pero en marzo el ejército de las Highlands se retiraba ya hacia el norte, rechazada en Derby su invasión de Inglaterra. Se había perdido hasta la más ínfima posibilidad de victoria. Los hombres de Carlos Estuardo marchaban a Culloden, hacia su destrucción.