El pericazo sarniento es un ensayo personal, el relato sin contemplaciones de un adicto a la cocaína. Carlos Velázquez ha logrado contar su paso por el infierno con una prosa dura, directa. La mente del adicto es un misterio y Velázquez emprende ese viaje al fondo de la noche y él regresa con este poderoso libro de memorias. La droga es un paraíso artificial y un infierno real, ese reloj que marca la hora del placer cuando la coca entra al cuerpo, la desesperación por la ausencia de la grapa, la ansiedad de un nuevo pase, la aventura de la compra en barrios donde el adicto se juega la vida. No hay ironía sin melancolía, este es el péndulo en el que oscilan estas páginas magnéticas.