Gota china, como el método a que hace referencia, es un insidioso conjunto de relatos que corroen y socavan la superficie de la cotidianeidad, dejando expuestos los cimientos de la naturaleza humana: la locura, la destrucción, el absurdo, la nostalgia, la soledad. Los personajes son llevados, luego de una larga y penosa paciencia, asistida una y otra vez por la nostalgia o el afecto, a un límite donde solo pueden optar por la resignación o la violencia. Luego de leer estos cuentos, esta última opción parece la más natural, la única posible.