La Fundación

MAX.— (Irónico.) Según se mire. Números por todas partes, sí… Pero de cálculo integral, nada. Un pobre tenedor de libros, como tú sabes muy bien

ASEL.— Y tú siempre le entendías ingeniero. Nos cambiabas los oficios… Porque yo sí soy ingeniero

LINO.— Soy tornero

nadie puede ser fuerte si no sabe antes lo débil que es.

Eres un ser humano. Fuerte unas veces, débil otras. Como casi todos.

Si creemos en ese futuro es porque, de algún modo, existe ya. ¡El tiempo es otra ilusión! No esperamos nada. Recordamos lo que va a suceder.

El mundo es maravilloso. Y ésa es nuestra fuerza. Podemos reconocer su belleza incluso desde aquí. Esta reja no puede destruirla.

Habla cuanto quieras. Pero no me preguntes… Estoy cansado