Estas Prosas fugaces, de Mercedes Roffé, son como bengalas que además de deslumbrar también alumbran, a secas, el mejor camino en la noche. «Podemos seguir usando todas las metáforas que queramos, a condición de no perder de vista lo que el vehículo significa y que el vehículo transporta ideología». La voz reflexiva, la voz crítica de Roffé abarca y expone misterios y evidencias de la tarea del poeta, del artista, del creador y de la materia del poema.
De Tarkowski a Novalis, de Cixous a Pizarnik o Michaux, consigna pasajes donde encuentra «aquello que años atrás daba en llamar ecos», y percibe y escribe sus resonancias.
Así como ya no abundan en el Río de la Plata los narradores que escriban –y lean— versos, tampoco abundan los poetas que escriban ensayo. Ecología de guerra: zona de especies en extinción. La mística de la literatura solo puede nutrirse de la excepción, lo contradictorio y lo impensado. Prosas fugaces es un libro plácido, elegante y sin concesiones.