Poesías Completas

Te amará mi recuerdo inacabablemente

Como a ti no amé a nadie

hay luz en demasía, no puedo verte el alma.

No eres tú el que me engaña; quien me engaña es mi sueño.

Perder la mirada, distraídamente,
perderla y que nunca la vuelva a encontrar:
y, figura erguida, entre cielo y playa,
sentirme el olvido perenne del mar.

Espínate las manos y córtame una rosa.

Alma que nada sabe y todo niega
y negando lo bueno el bien propicia
porque es negando como más se entrega.

Eres la piedra a cuyo lado paso

Sí, yo me muevo, vivo, me equivoco

¿Para qué más