Un On the Road de cucumelo, de rancho en la playa y vino en caja, con mucho más rock que jazz. Este viaje le da voz a una generación rota: los jóvenes —tan jóvenes que sabían que podían tener otra vida, después— que pasaron su adolescencia en dictadura y no pudieron, no supieron construirse por dentro de los márgenes culturales de un país convaleciente, que no tenía lugar para ellos.
Arena, la primera novela de Lalo Barrubia, es una coordenada imprescindible para ubicarse en la geografía literaria nacional de la salida democrática. Si bien los personajes están anclados en el Uruguay de los ochenta, igual que en el resto de la obra de la autora, sus voces están más allá del contexto generacional, porque vibran en la imperecedera frecuencia de lo humano.