Conocido sobre todo como filósofo estoico y político de primera línea, Lucio Anneo Séneca (h. 4 a. C. — 65 d. C.) es asimismo una figura fundamental del teatro latino. Autor respetado por el paso del tiempo, de él se ha conservado buena parte de sus obras, entre ellas las únicas tragedias romanas que han llegado hasta nosotros. Todas ellas son valiosas muestras del arte de Séneca, pero también de los factores temáticos, estilísticos, filosóficos y sociopolíticos que jalonaron el drama en la antigua Roma.
Pieza clave de su teatro, Medea ejemplifica a la perfección las semejanzas y, sobre todo, las diferencias entre la tragedia griega y la romana. Mediante dos ejes fundamentales —la infidelidad de Jasón y los celos exacerbados de la protagonista—, Séneca plantea una nueva interpretación del mito, en la que Medea ya no desempeña el papel de víctima, sino que se deja llevar por la irracional pasión de la venganza.