¿Qué es una escritora madura? ¿Qué es una escritura consumada? Son palabras que muchas veces no significan nada. Pero que adquieren otro sentido cuando hablamos de una primera novela: el sentido de la originalidad, de lo inesperado, de lo asombroso. El viento que arrasa, primera novela de Selva Almada, convierte esas palabras en elogios, en una descripción ajustada de lo que su prosa expresa. Una escritura firme, segura, potente y, quizá por eso, profundamente poética. Un reverendo y su hija de viaje por el Chaco, en un clima de conflictos y tormentas, entreveros y catástrofes latentes, diálogos filosos y locura solapada. Casi cinematográfica, El viento que arrasa es una novela en la que los personajes son nítidos, corpóreos, se escuchan sus voces, sus modos. Y los del paisaje: el monte, el sol fuerte, los árboles achaparrados, los autos rotos, las camisas transpiradas y las vidas destruidas.