Cuando Eneyde se ve obligada a elegir entre mantenerse como la mejor cazadora de la región y aceptar una propuesta de matrimonio, toma una decisión creyendo que aliviará la angustia de su padre. Ante una boda inminente y con un don que le permite oír los latidos de quienes la rodean, la joven intenta convencerse de que puede anticipar cualquier peligro. No obstante, una invitación pondrá en riesgo lo único que desea proteger: el corazón de quien más le importa.