El espejismo democrático quiere ser una incursión al fondo del gran tema de la democracia, como último refugio de coexistencia que nos ofrece el siglo XXI, la única forma posible de convivencia en el ámbito internacional y la mejor garantía de legitimidad interna. Pasan por el aguafuerte de la pluma de Lorenzo Meyer los distintos retos, a veces insalvables, que nos plantea el entorno; las oportunidades perdidas tras la alternancia; los amagos mediáticos basados en el miedo para evitar la transición; el uso de las antiguas prácticas del autoritarismo para conservar el poder; los enconos rastreros de la clase política; los efectos de la democratización sobre las masas; y la posibilidad, tal vez quimérica, de construir y validar un nuevo proyecto nacional.