Comenzó a aburrirme que siempre me hablara de este chico, con el que se seguía viendo a escondidas, pero lo que sí de plano no aguanté fue que me empezara a hablar como las señoras. “Ya pronto te llegará el momento”, “cuando encuentres al indicado, hasta te vas a arreglar”, “sentirse amada es lo más”. A lo mejor porque me había tardado en bajar, me había hecho a la idea de que iba a llegar tarde a todo. Y aunque sí me gustaban los chicos, no tenía ganas de ver a alguno de ellos a la salida ni de contarles mis cosas. Yo quería seguir teniendo una amiga y jugar a ser locutora de una radio para niñas