La Imitación de Cristo, después de la Biblia, es uno de los libros más leídos por cristianos y seguidores de otros caminos espirituales. Para los lectores del siglo xxi es una obra totalmente singular, pues data de finales del siglo xiv y se inscribe en la corriente espiritual llamada Devotio moderna, ampliamente difundida entre laicos y personas letradas de la época, que mantuvo gran influencia en la piedad cristiana posterior.
Aunque la forma de interpretar el mundo de dicha corriente es ineludiblemente dualista y reduccionista, Tomás de Kempis poseía una mente libre, que no se dejó influenciar por ninguna corriente mística en particular. Para él lo importante era la experiencia espiritual del encuentro con Cristo y el desapego de uno mismo, que tanto llamó la atención de psicólogos como Sigmung Freud y C.G. Yung, e incluso del filósofo Martin Heidegger.