Margaret Atwood tiene una forma de escribir única; es como si me hipnotizara y ¡no me dejara parar de leer! Eso, sumado a su ingenio, pues no da espacio para decepciones cuando se trata de sus trabajos.
En este caso (y como el título lo dice) tenemos nueve cuentecillos bastante entretenidos y durante buena parte de su lectura me tuvieron en ascuas tratando de adivinar el final (nunca lo logré). Los primeros tres estan conectados, cosa que me encantó porque le da la oportunidad a todos los personajes que leímos en el 1ero de contar su versión de la historia y justificar o disculparse por sus acciones. Es uno de esos casos en los que, al personaje que terminas aborreciendo en el 1er libro para el segundo ya le empiezas a tomar cariño. Me pareció una idea bastante original y muy bien hecha.
El resto de los relatos ya no tienen relación entre sí, pero pueden valerse muy bien por sí mismos. Mis favoritos fueron "Colchón de piedra" y "A la hoguera con los carcamales", aunque en este último el ponerme en el lugar de la ancianita con serios problemas de visión me mantuvo estresada toda la lectura. "La mano muerta te ama" también me gustó bastante, aunque admito que el final de ese sí me decepcionó.
La lectura no fue taaaan ligera como yo esperaba pero meh, cada minuto invertido en este libro ha válido la pena. Y aunque este seguro no estará en mi top 5 de libros del 2019, definitivamente Margaret Atwood sí está colgándose en mi top de autores y autoras favorit@s.
Aquí hay un matiz muy particular de la maldad.
Ha sido una travesía fría, en el camino hemos cruzado fuentes sanguíneas, esculturas anatómicas y se nos han unido unos divinos duendecillos danzarines...