comerciales con el fin de establecer una ruta hacia el intercambio con Asia a través del cabo de Buena Esperanza. Esta estrategia comercial, pese a su injerencia en el comercio tradicional, en un principio no resultaba muy nociva para el desarrollo de las sociedades africanas. Sin embargo, y aquí tiene lo importante, sirvió de base para el establecimiento de la posterior industria esclavista a gran escala estructurada de forma contundente desde finales del siglo XVII