Aun el sol no había salido, pero ya empezaba a clarear, pronto amanecería, había sido una noche estrellada, de esas en las que desde hacía mucho tiempo me dedicaba a contemplar el firmamento, estuve mirando esos puntitos luminosos en el cielo, la idea de que tanto como hay por allí, no puede estar vacío, me viene rondando desde hace muchísimo tiempo, ¡Eso seguro que no es posible!, pero ¿Cómo se podría llegar a saber, si es así, o no?
Aun el sol no había salido, pero ya empezaba a clarear, pronto amanecería, había sido una noche estrellada, de esas en las que desde hacía mucho tiempo me dedicaba a contemplar el firmamento, estuve mirando esos puntitos luminosos en el cielo, la idea de que tanto como hay por allí, no puede estar vacío, me viene rondando desde hace muchísimo tiempo, ¡Eso seguro que no es posible!, pero ¿Cómo se podría llegar a saber, si es así, o no?
Me fui a acostar, tenía que dormir, aunque solamente fuera un poco, para no estar cansino después toda la jornada. Cuando estaba cerrando el balcón, eché mi última mirada a ese cielo maravilloso, y pensé, “¡Seguro que sí!, que hay muchos habitantes en otros lugares, aunque quizás no sean como nosotros”
Me desperté sobresaltado, de un salto me bajé de la cama inmediatamente, y poniendo los pies en el suelo, al contacto con el frío de las baldosas, me espabilé, ¿Qué había pasado?
PUBLISHER: TEKTIME