En el popular barrio de Triana hay un dicho sobre el grado de verdad de cualquier sentencia que un tercero entona por derecho: eso es “lavangelio”. Pocos saben que esa misteriosa expresión sevillana tiene un origen insospechado. Los inspectores Jiménez y Villanueva están a punto de descubrirlo. Pero antes nuestros héroes tendrán que enfrentarse a un secreto que ni el del Código Da Vinci. Una serie de crímenes, ejecutados de horrendas maneras, mediante la suerte de la “cruda”, están cebándose con gentes cercanas a la hermandad Serva La Bari, guardiana de las esencias de la más pura sevillanía. El asesino parece estar buscando algo desesperadamente, un extraño documento apócrifo que custodian miembros de esa ancestral cofradía y que, al parecer, desvelaría los verdaderos hechos y lugares de la vida de Cristo… y también las ocultas razones por las que la Gracia se ha mantenido firme en Sevilla durante tantísimo tiempo.
Vuelven los inspectores Jiménez y Villanueva en una nueva y desternillante entrega de la saga de El asesino de la regañá, que ha inspirado una serie de TV, una obra de teatro y alguna que otra marcianada… escrita por Julio Muñoz Gijón @Rancio.