El camino hacia Cópol puede considerarse un episodio y una de las aventuras más importantes de la duquesa Siky, la joven y valiente guía espiritual del pueblo tulumbuck.
Acompañada por sus dos jinetes fantasmas, que representan a los respectivos dioses del sol y del cielo, comienza un viaje de búsqueda hacia tierras lejanas y desconocidas donde se confrontará con otros pueblos y otras costumbres. También conocerá a unos personajes que la acompañarán durante todo el trayecto.
Marchando con cuidado y siempre protegiendo su persona (siendo el símbolo viviente de toda su gente), se enfrentará con muchas dificultades que la harán madurar y comprender su personal posición y su deber.
En una aventura que empieza sin un destino aparentemente establecido, la duquesa y sus nuevos amigos buscarán el sendero de regreso a casa al comprender que llevan con ellos mismos los tesoros más grandes y valiosos para compartir con sus hermanos y hermanas en su tierra de origen. Solo así podrán evolucionar hacia la sabiduría y la libertad espiritual.