En general me gustó. Aunque el worlbuilding y las reglas de la magía no queda muy claro. En realidad eso no es malo, pero al menos a mí, los deus ex machina que pueden resultar de un sistema de magia laxo, me sacan de la suspensión de incredulidad. Como ocurre con otras obras de la autora, lo mejor del libro es su estilo, es muy bello. Otra cosilla que debo decir, pero que no es un problema particular de este libro sino de la literatura en general, es que los mundos femenino (la reproducción) y masculino (la guerra) siguen presentándose como rígidamente distintos y limitados. Aunque debo aclarar que en este universo esta situación no está para nada idealizada...