Tras haber perdido su trabajo y a su esposa —después de un matrimonio fallido—, William Least Heat-Moon llega a un punto de inflexión en su vida y decide coger su camioneta y realizar un viaje de 13.000 millas por carreteras secundarias, llamadas “Blue Highways” porque aparecían dibujadas en azul en los mapas antiguos de Estados Unidos.
Aclamada como una obra maestra de la literatura de viajes norteamericana, Carreteras azules, más que una simple novela autobiográfica, es un viaje inolvidable a lo largo de los caminos de Estados Unidos, que se adentra en las ciudades y pueblos norteamericanos menos conocidos, así como en las personas que habitan estos parajes.
William Least Heat-Moon, un autor de la talla de Kerouac, según el Chicago Sun Times, partió con poco más que la necesidad de poner su casa detrás de él y un sentido de curiosidad acerca de «esos pequeños pueblos que aparecen en el mapa, si es que lo hacen, solo porque algún cartógrafo tiene un espacio en blanco para rellenar».
Lugares como Remote (Oregón), Simplicity (Virginia), New Freedom (Pensilvania), New Hope (Tennessee), Why (Arizona) o Whynot (Misisipi). Sus aventuras, sus descubrimientos y sus recuerdos de las personas extraordinarias que encontró en el camino son toda una revelación de la verdadera y profunda cultura vial estadounidense.