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Sarah Maclean

Nueve reglas que romper para conquistar a un granuja

  • alquijayandrea704has quoted1 hour ago
    —De ninguna manera. En realidad este giro de los acontecimientos solo me obliga a visitar a lady Calpurnia en Allendale House.
  • alquijayandrea704has quoted3 hours ago
    No atreverte a vivir una aventura es peor que haber tenido una experiencia decepcionante.
  • alquijayandrea704has quotedyesterday
    5
    El marqués de Ralston estaba cómodamente sentado en un enorme sillón, frente
  • alquijayandrea704has quoted2 days ago
    Ella abrió los ojos como platos.
  • Catalina Villagrahas quoted2 days ago
    «Si yo soy una emperatriz, él es el único hombre digno de ser mi emperador».
  • Victoriahas quoted5 months ago
    Maldición, si hubiera sabido cómo sería la soltería, me habría casado con el primero que se me declaró.
  • Elena Herperhas quoted2 years ago
    —¿Sabías que la primera vez que me llamaste emperatriz fue aquí? ¿En este jardín?

    Él arqueó una ceja y ladeó la cabeza, intentando hacer memoria.

    —¿De veras?

    Ella escapó de sus brazos y se volvió de nuevo hacia la fuente.

    —Fue hace diez años. Yo había salido para esconderme en el laberinto, desesperada por escapar del fracaso que estaba resultando mi primera temporada. Tú estabas aquí. —Callie pasó los dedos por el agua lentamente mientras pensaba en aquella noche, hacía tanto—. Las palabras que me dijiste consiguieron que solo pudiera pensar en ti durante toda una década.

    La besó otra vez, centrándose en su voluptuoso labio inferior hasta que ella suspiró.

    —Pienso conseguir que pienses solo en mí durante mucho más tiempo —aseguró. Entonces le capturó la mano y le besó las puntas de los dedos—. Aunque sé que debería lamentar los años que has pasado esperándome, confieso que estoy encantado de que esperases hasta que abriera los ojos y, por fin, te viera, cariño. —La volvió a apretar entre sus brazos—. Pero me siento muy frustrado por no haberlo hecho antes… Podríamos llevar ya una década de felicidad y haber tenido un montón de críos que probaran nuestro amor.

    —Y dos cicatrices menos.

    Él se rió.

    —En efecto, diablillo.
  • Elena Herperhas quoted2 years ago
    —Creo que te he amado durante toda mi vida.

    Los ojos azules de Gabriel brillaron bajo la luz plateada de la luna.

    —Y yo te amaré durante el resto de la mía, emperatriz
  • Elena Herperhas quoted2 years ago
    —En efecto. Jamás he llegado a darte las gracias por conseguir que se quedara con nosotros.

    —No puedo imaginar que ninguna mujer, incluso aunque sea tu hermana, quiera abandonarte una vez que te ha conocido, Gabriel. —Sonrió mirando aquellos vibrantes ojos azules—. A pesar de que me temo que vas a tener que conformarte conmigo.

    —Excelente —murmuró contra sus labios—. Porque jamás permitiré que me dejes.
  • Elena Herperhas quoted2 years ago
    No sabía qué esperar cuando ese lacayo me ha entregado la invitación a una escandalosa cita clandestina. —Le puso los labios en la nuca y le lamió la piel, haciendo que un escalofrío recorriera la columna de Callie; una sensación bienvenida en la calurosa noche—. Eres todo un peligro para mi reputación, lady Ralston.

    Ella suspiró de placer por la caricia antes de responder.

    —Se te olvida, milord, que todo lo que sé lo he aprendido de ti. —Callie se giró en sus brazos y le metió los dedos entre los espesos cabellos mientras buscaba su sonriente mirada—. Me has convertido en una auténtica libertina.
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