«hipótesis del mundo justo» (JWH por sus siglas en inglés). Este es un sesgo cognitivo según el cual algunas personas confían en la presunción de un mundo justo: el mundo es un lugar justo, donde las cosas malas pasan «por un motivo», o bien se ven compensadas por una especie de «contrapeso moral» en el universo. Vimos que la gente que mostraba el sesgo JWH era, por ejemplo, más propensa a culpar a la víctima en un hipotético escenario de ataque sexual. Si el mundo es justo, entonces no deberían ocurrir cosas malas al azar a personas inocentes; por tanto, debe de haber un fallo en la conducta de la víctima. Encontrar formas de culpar a las víctimas es una profilaxis psicológica para algunas personas, porque les ayuda a soportar la ansiedad producida por las amenazas incontrolables del entorno, manteniendo al mismo tiempo una imagen consoladora de que el mundo seguirá siendo justo para ellos.