Un estudiante de filología colabora con arqueólogos provenientes de universidades de diferentes países en unas excavaciones cercanas al Éufrates. A falta de un año para finalizar su tesis doctoral descubre una valiosa tablilla que se apresura a entregar al profesor a cargo que, además, es toda una eminencia en el campo de la arqueología. Al siguiente día recibe la noticia del fallecimiento de su abuelo, lo que le convierte en el único beneficiario de sus bienes. Al regresar a Galicia hereda, entre otras cosas, una misteriosa caja que contiene un libro de más de dos mil años de antigüedad y que narra la gesta y aventuras de un grupo de celtas. El misterioso libro también habla de los adoradores del mal y de su búsqueda para hacerse con la llave que abre una extraña caja. Lo curioso es que dicha llave tiene forma de trisquel, al igual que uno de los relieves que poseía la tablilla descubierta por él mismo.