A partir de investigaciones de terreno realizadas en el norte y en el sur de Chile entre 2009 y 2012, los autores de este libro muestran cómo el trabajo coloniza la vida familiar de los hombres y mujeres que se desempeñan en los rubros de la uva, el salmón y el cobre. Las migraciones, largas jornadas y sistemas de turnos los obligan a alternar residencia y trabajo, pues deben laborar de noche, pasar días o semanas lejos de sus casas o realizar jornadas que pueden superar las veinte horas. Esto desestructura la relación que existe entre el tiempo de la vida privada y el tiempo de la vida laboral, modificando, además, las configuraciones familiares. Gracias a la utilización de distintas variables -como feminización, tipos de turnos, migración, rango salarial y acceso al consumo-, los autores consiguen caracterizar la inserción laboral de los tres sectores que concentran a la quinta parte de los asalariados del país, haciendo un aporte fundamental para comprender el mundo del trabajo contemporáneo.