Cuando nos sentimos víctimas tendemos a aislarnos. Sentimos dolor y miedo, y andamos siempre en busca de alguien que nos salve, que lo haga por nosotros. Ahora tenemos la oportunidad de descubrir nuestra capacidad de responder a la vida no como víctimas, sino de maneras que nos den poder. Descubriremos que a medida que empecemos a conectarnos con lo que yo llamo el Ser interior podemos contribuir a la mejora de nuestra calidad de vida. Saber que no tenemos que depender de nadie, sino que dentro de nosotros tenemos una capacidad tremenda de hacer cambios positivos en nuestra vida, es un sentimiento maravilloso, increíblemente liberador. Hay personas a quienes puede asustarles esta nueva liberación, porque la ven como una responsabilidad. Sin embargo, esta palabra quiere decir, simplemente, que somos capaces de responder a la vida.