Un cuento de brujas

La vida se supone que debe ser medida por el propósito. Todos nacen con un propósito, ya sea que elijan creer en él o no. Algunos están para aprender, otros para enseñar, mientras que otros simplemente para observar.

a mayoría de la gente elige el amor. Y por eso estamos aquí, para asegurarnos de que el odio no gane.

Riesgoso o no, no dejaré que vayas sola. El mundo puede vivir sin un príncipe, pero solo tiene una de ti.

En ese momento, Brystal supo que ambos habían desarrollado algo más que una amistad. Era diferente a cualquier otra cosa que Brystal hubiera experimentado antes y no podía poner sus sentimientos en palabras. Sin embargo, así comprendió por qué los poetas y letristas hablaban tanto del amor.

estar cerca de Siete hacía que todos sus problemas desaparecieran. No estaba plagada de pensamientos negativos ni miedo, por el contrario, se sentía protegida y feliz con su presencia. El mundo no parecía tan abrumador o difícil como antes.

–Lo siento, me sigo olvidando quién eres –dijo–. Creo que es lo que más me gusta de ti, Brystal. Eres la persona más poderosa del mundo y aun así no te comportas de ese modo. A otros se le subiría a la cabeza el poder, pero tú eres increíblemente normal. Espero que no te moleste que diga eso.

–No hace falta que te disculpes, me hace bien escucharlo. Creo que eso es lo que más me gusta de ti, Siete… Me haces sentir normal.

Lo más difícil de estar en tu lugar es que tienes mucha autoridad, pero no tienes nada de poder sobre las elecciones del resto.

tienes que aprender a pedir ayuda cuando la necesitas, sin importar lo vulnerable que te haga sentir.

A veces, cambiar cómo pensamos y cómo nos sentimos son las transformaciones más difíciles que una persona puede atravesar.

A veces, pedir ayuda es tan heroico como darla.