En este ensayo, Villoro compara el pensamiento moderno con el renacentista, y con ello reinterpreta el Renacimiento a través de la modernidad. Para el filósofo, es en los siglos XV y XVI cuando se manifiesta el primer germen de lo que será un giro decisivo en la imagen del mundo y del hombre y en el modo de pensar sobre ellos. Así, para ver el Renacimiento a luz del pensamiento moderno, aborda la pérdida del centro, las idea del hombre, de la cultura, de la historia, del alma y de la naturaleza y de la magia y la ciencia; a la luz del Renacimiento, sobre el pensamiento moderno trata las características de éste, la crisis de la modernidad y cuestiona la formación de nueva figura del mundo.